Las pestañas fueron muchas cosas: jugador de fútbol profesional, fenómeno de moda, filántropo, amante de los mariscos, chef magnífico, pero una cosa que no era un pescador experto. Su falta de habilidades de pesca fue su vergüenza.
Él simplemente no tenía la paciencia para ello. Claro, le gustaba la moda de pesca, las gafas de sol de diseño y descanso junto al lago con una botella de burbujeante, pero la parte de la pesca real de ella? No es un fanático, y realmente no le gustó obtener agua sucia de estanque en su pelaje.
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Dicho esto, fue un galardonado campeón de aves de aves de novato. Es solo que la pesca no era una de sus fortalezas.
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Una vez llegó a casa después de un día en su yate con un cuento alto sobre un marlin de 45 libras. Siguió tratando de persuadirme de que casi lo atrapó, y lo llamó “el que se escapó”. Más bien, francamente, creo que estaba lleno de Catnip.
Tu amigable adicto a la belleza comunitaria,
Karen